Patada a seguir

Hace ya un par de meses que la nueva administración americana está trabajando y las líneas maestras de la confrontación política están ya delineadas. El esfuerzo por aligerar el tamaño del estado es liderado por DOGE (Elon Musk como su cabeza indiscutible). Esto está trayendo a la discusión política dos elementos cruciales:

  1. El estado ha crecido durante décadas de una manera descontrolada arrogándose espacios de decisión que corresponden a otras esferas de la sociedad 
  2. El estado ha desarrollado una cantidad innumerable de Agencias a las cuales se asignan recursos ingentes sin ningún tipo de control sobre el uso de esos recursos.

Por primera vez en décadas la necesidad de disminuir el tamaño del estado es una idea apoyada por los ciudadanos y puede llegar a ser una realidad. Esto hechos han llegado a la opinión pública principalmente a través de X pues la prensa tradicional hace tiempo que es un arma de propaganda izquierdista y estatista. Se ha descubierto un entramado de agencias y organizaciones no gubernamentales que no es más que una manera de financiar proyectos de ingeniería social, propaganda y operaciones de influencia de la opinión pública en favor del poder de la izquierda. 

Trump ha firmado numerosas ordenes ejecutivas (Executive Orders) pero para que esos cambios se materialicen a largo plazo hace falta que esas órdenes se codifiquen en leyes, el grupo republicano es un grupo no muy adepto al presidente Trump y eso está ralentizando la actividad legislativa. Trump no tiene mucho tiempo, apenas un año. Hay elecciones “mid term” en Noviembre de 2026. Los 435 asientos del congreso y 33 de los 100 senadores están sometidos a reelección. Si el congreso cae del lado demócrata el resto de la legislatura será un tiempo inerte. Para que el voto sea republicano y la actividad legislativa traduzca en leyes las decisiones de Trump, este necesita que la gente vea cambios en su vida. De momento la frontera Sur está cerrada, y la repatriación de inmigrantes ilegales ha comenzado, algunos americanos están empezando a encontrar trabajo (antes ocupado por ilegales). Los precios de los carburantes están bajando lentamente, sin embrago en marzo la confianza del consumidor estadounidense se desplomó a su nivel más bajo desde noviembre de 2022, y el índice de sentimiento del consumidor de la Universidad de Michigan cayó a 57, de 64.7 en Febrero y de 79.4 hace un año. Es curioso como el problema del déficit, es ahora un motivo de conversación entre ciudadano corrientes. Se adivinan cambios, pero es un tiempo de incertidumbre y la bolsa lo ha notado. Los modelos de los analistas financieros funcionan mejor con malas noticias que con incertidumbre, no hay manera de modelar incertidumbre en un Excel de “net present value”. Sin embargo, la discusión de tarifas ha hecho que muchas empresas hayan empezado a traer manufacturas a Estados Unidos, si se puede hacer rápido y eso mejora las posibilidades de trabajo del americano medio las cosas pueden irle bien en el mid-term.

Si el gasto del gobierno es moderado, la actividad de DOGE será fundamental para ello, y el déficit disminuye en 2025 esto mandara a los mercados el mensaje de que la reducción del déficit es una idea seria. Si en 2026 se puede llegar a un presupuesto neutro la economía americana se dispara. Pero eso son hipótesis en este momento.

El partido demócrata ha comenzado una guerra judicial contra la administración porque se les acaba la gallina de los huevos de oro. La corrupción de la izquierda al albor de agencias gubernamentales es de un tamaño impensable. Por poner un ejemplo, la administración decide cerrar USAID, un bufete de abogados de la orbita demócrata va “judge shopping”, es decir van explorando jueces hasta que consiguen uno que admita a tramite la demanda para no cerrar USAID. Un simple juez de distrito puede parar las decisiones de un presidente, esto sienta un precedente legal en el que la corte suprema tiene que intervenir pronto. Para hacerse una idea, en Washington DC un tercio de los jueces no nacieron en América, jamás tuvieron experiencia como jueces antes de ser nombrados por la administración de Biden, en definitiva, son simples militantes demócratas con toga.  Esa es la guerra judicial que los demócratas han planteado. En otro orden de cosas los demócratas siguen con su libro comunista de acción política, que tantos frutos les dieron en las revueltas previas a las elecciones de 2020, con la guerra callejera y agitación social dinamitada por la muerte de un drogadicto. Sin embargo, esta vez no están funcionando. El público se ha dado cuenta del nivel de propaganda de la prensa y las fuentes de información ahora son mucho más variadas, con su proporción de ruido, pero la falta de credibilidad de la prensa tradicional no se ha recuperado ni es probable que lo haga en un futuro cercano. Además, se está viendo el engranaje de “agit prop” financiado por agencias gubernamentales ligadas al partido demócrata y otros intereses nefarios. Todo esto me recuerda el magnífico libro de Richard Pipes en el que sostiene que la toma del poder por los bolcheviques en octubre de 1917 fue un golpe de estado, no una verdadera revolución, destacando el pequeño número de personas involucradas y la falta de apoyo popular generalizado. Quien no conoce su historia está condenado a repetirla y eso es lo que estamos viendo ante nuestros ojos. Sin ir más lejos ha salido a la luz que 5.5 millones de ilegales obtuvieron el SSN (Social Security Number) este es el número que te identifica y desde el punto de vista administrativo demuestra que existes y eres un ciudadano, sin él no puedes abrir una cuenta bancaria, tener una tarjeta de credito, un teléfono, alquilar un piso, en definitiva nada. De eso 5.5 millones, 1.3 millones ya están en Medicaid ( gratis total tipo Solchaga), el reemplazo de la población pagando a los que vienen es un hecho indiscutible. La idea es hacer un sistema de poder del partido demócrata ininterrumpido, un régimen. 

En política exterior, el mundo debe tomar en serio la discusión con Groenlandia. Mas allá de los recursos naturales, el hecho de que los rusos tienen su flota de submarinos nucleares en la península de Kola hace de esta isla un lugar estratégico en la defensa americana. Desde la segunda guerra mundial Groenlandia jugo ese papel para proteger el atlántico norte, y los americanos han tenido presencia continuada con una base militar desde 1943. La población total de la isla es de apenas 40,000 habitantes y puede ser persuadida. No hay que olvidar que Usa está acostumbrada a comprar territorios, desde Luisana hasta Alaska y ahora mismo tiene territorios no incorporados como la isla de Guam por ejemplo, así que no es descabellado adquirir Groenlandia.

Con Europa la distancia se agranda por momentos con dos elementos primordiales en esta separación progresiva. Desde el punto de vista económico Europa ha estado grabando con tarifas los productos americanos sin que US lo haga de igual manera. Ahora Trump dice, vamos a jugar con las mismas reglas, y los Europeos se enfadan…

La distancia en cualquier caso se agranda en cuestiones incluso más importantes. Europa se ha convertido en una dictadura burocrática en la que Le Pen va a ir a la cárcel, en Rumania solo pueden votar a los que Bruselas aprueba, y un Reino Unido en el que la discriminación legal contra una parte muy especifica de la poblacion es un hecho a partir de esta semana. En Alemania al día siguiente, 24 horas de reloj, de ganar las elecciones el nuevo canciller desmintió su postura en la campaña electoral con respecto a la emigración.   

De momento hay muchos frentes abiertos, y bastantes turbulencias. En cualquier caso nos quedaremos aquí, si queremos playa nos vamos a Hawaii, si queremos esquiar vamos a Utah, si queremos buena comida… comemos en casa de Jose Andrés (el cocinero demagogo que vende tortilla de patata rica y cara en la zona mas chic de nueva york, Hudson Yards), de coches nos compraremos un “haiga” como los de Oviedo y la pasaremos chupendeleré que diría mi abuelo.

Ya escampará …